Consejos para Cuidar nuestros productos y asegurar su Durabilidad

1. Limpieza Regular y Suave

• Para eliminar el polvo y la suciedad diaria, utiliza un paño suave y seco o ligeramente húmedo. Evita el uso de productos de limpieza abrasivos, ya que podrían dañar la pintura y el acabado de la mezcla cementicia.
• Si tus productos tienen detalles pintados a mano, límpialos con cuidado para no frotar con demasiada fuerza, protegiendo así los detalles y colores.

2. Evita la Exposición Prolongada a la Humedad

• Aunque los productos de mezcla cementicia son resistentes, la exposición prolongada a ambientes muy húmedos puede afectar su integridad. Si tienes estos productos en lugares como baños o exteriores, asegúrate de que estén bien ventilados y secos.
• Si decides colocarlos en el jardín o balcón, procura que estén bajo algún tipo de cubierta para evitar el contacto directo con la lluvia.

3. Protección contra el Sol Directo

• La luz solar directa puede causar decoloración en las piezas pintadas a mano. Para proteger los colores y detalles, coloca tus productos en áreas donde reciban luz indirecta o en espacios interiores lejos de las ventanas.
• Si deseas exhibirlos al aire libre, intenta ubicar tus piezas en zonas sombreadas o con luz parcial.

4. Cuida de los Cambios de Temperatura

• Los cambios bruscos de temperatura pueden afectar la estructura de la mezcla cementicia. Para prevenir grietas o desgastes, intenta mantener tus productos en lugares con una temperatura estable.
• Si planeas colocar tus productos en exteriores, evita zonas que reciban mucha exposición a temperaturas extremas, ya sea mucho frío o calor excesivo.

5. Manejalos con Cuidado

• Los productos de mezcla cementicia son sólidos y duraderos, pero no indestructibles. Procura manipularlos con cuidado, especialmente si los colocas en estanterías altas o superficies elevadas.
• Al moverlos, hazlo con ambas manos para evitar golpes o caídas que puedan dañar la estructura o los detalles pintados.